Desde hace unas semanas la elección del "Baila el chiki chiki" como canción representante de España en Eurovisión ha creado muy diversas opiniones, y creo que es en parte porque la gente no entiende el motivo de que ésta haya sido elegida.
Hace ya unos días que tenía pensado hacer un post sobre este tema, que me parece bastante interesante, pero echando un vistazo al blog de Mikel Razkin, he visto que se me ha adelantado.
Así que símplemente, copio aquí su reflexión, con la cual coincido completamente.
29 Marzo 2008
“Baila el chiki chiki” Por Mikel Razkin.
La elección de la canción “Baila el chiki chiki” para representar a España en el Festival de Eurovisión el próximo 24 de mayo en Belgrado parece haber levantado unas controversias que a mi entender nada tienen que ver con el sentido último de esta competición internacional. Rodolfo Chiquilicuatre es sin lugar a dudas el mejor representante que España podía enviar al concurso porque es quien mejor encarna lo que en los últimos años se consume en general en la televisión española.
Sólo tenemos que encender la televisión para ver que los programas del corazón, los grandes hermanos y sus derivados, las desgracias personales narradas en primera persona, la casposidad extrema y la carencia de horizontes de quienes aparecen en ella es cada vez más generalizada. Y por eso mismo Rodolfo Chiquilicuatre es quien mejor lo puede personificar, quien mejor nos va a representar puesto que da vergüenza ajena, es chabacano y transmite lo peor de este país. Esta creación del genial Buenafuente ha sabido reírse de sí mismo – de nosotros mismos – y debería servirnos para que reflexionáramos no sólo acerca de qué tipo de televisión se está haciendo, sino sobre en qué clase de país vivimos.
Tenemos lo que nos merecemos, y esto no lo digo sólo yo. El holandés Rem Koolhaas, en su obra “Content”, sitúa a España en la cabeza mundial del consumo de telebasura. Por eso creo que España es favorita y conseguirá un nuevo hito televisivo como lo hicieron en su momento Massiel y Salomé. Del NO-DO al Frikismo en su máxima esencia; ahí es nada.
Los detractores de Chiquilicuatre reniegan de él, dicen que exporta una imagen de España que no es real, que nos va a dejar en mal lugar, que vamos a ser el hazmerreír de Europa. La respuesta es clara: viajen algo más y vean que ya somos el hazmerreír de Europa, que se nos señala incisivamente no por ser el país de la paella, el sol, el flamenco y las corridas de toros, sino por tener en el plano económico las tasas de desempleo, siniestralidad y temporalidad laboral más altas de la Europa occidental. En otro lugar quedan aspectos culturales como unos índices de abandono y fracaso escolar vergonzosos. Todo esto también se exporta “Made in Spain”.
Así que no nos quejemos tanto de la imagen que damos, porque la teledemocracia que se sacaron de la manga los productores de estos inventos televisivos dictaminó que Chiquilicuatre nos iba a representar a todos. Atrás quedaron las máximas de la democracia que decían una persona, un voto. Ahora es un SMS, un voto. Tu opinión vale un euro.
El año que viene me gastaré mi segundo euro en un SMS votando por el rumano que todas las mañanas toca su acordeón en el parque de la Taconera. Él también representa lo que es el día a día en este país.
Reseña de cine: "Recuerdos perversos" (2007)
5 years ago
No comments:
Post a Comment